El Disidente
Antares Cervantes
Para las penas, pan
Tratar de definir la derecha política en México, es realmente complicado, existen muchas variantes y diferentes acepciones sobre el tema, aunque un gran número de especialistas la mencionan como la condición de organizaciones e individuos que se caracterizan por su inclinación conservadora, reaccionaria y tradicionalista de la moral y la distribución de la riqueza.
Históricamente en nuestro país el partido de derecha logró la alternancia de la Presidencia de la República en el año 2000 (después de 71 años de gobierno del partido oficial), manteniendo la continuidad en el 2006.
Para la derecha en el Estado de Hidalgo del año 2000 al 2012, tuvieron todo el apoyo y respaldo de los mandatarios nacionales, en las elecciones del 2002, obtuvieron 23 alcaldías, históricamente el mayor número que han ganado en la entidad, la presidenta estatal en esa época (Diputada federal en dos ocasiones), realizó un trabajo que la convirtió en la mujer más destacada de su organismo, sus resultados nadie los ha podido igualar, algo que ninguna otra de sus militantes ha logrado. Ya sin el peso presidencial nacional, en la elección del 2016, se posicionaron como segunda fuerza, contando con 7 diputaciones y 16 alcaldías, entre ellas Pachuca y Mineral de la Reforma. El dirigente de ese momento, posteriormente llegó a ser presidente de la junta de gobierno del congreso local, un cargo que por primera vez en la historia ocuparía un miembro de su partido. Al parecer, estos son sus únicos logros recientes. Otros partidos cuentan con números y logros mayores a estos.
En las elecciones del 2020 tuvieron un dirigente regiomontano que sólo ganó 5 alcaldías, comenzando el declive de los derechistas, la falta de compromiso, de atención, de estrategias y trabajo en sus estructuras causaban la renuncia de sus militantes que emigraban a otros partidos, para colmo de males, el mandatario tuvo la genial idea de realizar un video (que sólo exhibió su ruptura interna) dirigido a la ciudadanía, militantes de su partido y medios de comunicación, dónde salía culpando a su antecesor de los malos resultados, solicitando que lo desconocieran, un acto incongruente y desleal, pedía unidad y estaba incitando la división. No logró su cometido y los resultados hablan por si mismos, su nulo trabajo hundió al partido, pasando de la segunda a la cuarta fuerza política. Por si fuera poco, en ese mismo proceso electoral ’Lord Vídeos’ les vendió de manera obligatoria propaganda carísima a sus candidatos, obviamente de pésima calidad, fue notable su ausencia en los municipios y oficina particular, la falta de prerrogativas, recursos y apoyo terminó por decepcionar a un gran número de sus afiliados, convirtió a su partido en el gran perdedor de las elecciones del 2020.
Los últimos 23 años azules en Hidalgo han sido de muy pocos logros comparados con otros partidos, desde la dirigencia anterior a la actual, aparte de la sumisión al tricolor, sólo se han dedicado a culpar y denostar al actual gobierno, no se ha visto un trabajo relevante al interior o exterior de su partido, no tienen perfiles, siempre las mismas caras en rotación o ponen candidatos ciudadanos menospreciando a sus agremiados, veremos si en el 2024 pueden ganar más alcaldías y diputaciones que en el pasado ya que la única labor destacada en este mandato ha sido renovar sus instalaciones, tal vez su estructura partidista no necesita renovación y de sus estrategias mediáticas o políticas no podemos hablar ya que no hemos visto ninguna o tal vez su estrategia sea tan efectiva que si logren el cambio. El cambio de partido de sus militantes.
